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Mastopexia en Bogotá – Cirugía de levantamiento de senos

Especialistas en Elevación Mamaria o Mastopexia

La mastopexia es un procedimiento estético que eleva y reafirma los senos, restaurando su forma y firmeza para lograr un contorno más juvenil y armonioso. ¡Agenda tu consulta hoy!

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    ¿Qué es la mastopexia?

    La mastopexia, o cirugía de levantamiento de senos, es un procedimiento estético que corrige la caída del busto, devolviéndole firmeza y una apariencia rejuvenecida. Con el paso del tiempo, embarazos, cambios de peso y factores genéticos, los senos pueden perder su posición original debido a la falta de soporte óseo o muscular, ya que su única fijación es la piel que los envuelve.

    Cuando la piel no puede sostener el peso de las mamas, especialmente si son voluminosas, se produce una caída excesiva. La cirugía de levantamiento de senos consiste en elevar la areola y el pezón, remodelando el tejido mamario para devolverle firmeza y forma. Si el volumen no es excesivo, solo se elimina la piel sobrante sin necesidad de reducir tejido mamario. En algunos casos, la mastopexia puede combinarse con implantes para aumentar el tamaño del busto. El resultado es un pecho más firme, simétrico y con un aspecto rejuvenecido.

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    Tipos de mastopexia: técnicas según el grado de caída del busto

    La mastopexia o lifting mamario es un procedimiento quirúrgico diseñado para levantar y reafirmar los senos caídos. En Bogotá, existen tres tipos principales de mastopexia, clasificados según el grado de ptosis mamaria (caída del pecho) y el tipo de incisión que se realiza:

    1. Mastopexia periareolar (o en donut)

    Ideal para casos de ptosis leve, esta técnica consiste en una incisión circular alrededor de la areola. Se elimina el exceso de piel y se reposiciona el pezón, logrando un resultado natural con cicatrices mínimas.
    Duración aproximada: 2 horas y 30 minutos.
    Ventaja: Menor visibilidad de la cicatriz.

    2. Mastopexia vertical (o en piruleta)

    Indicada para pacientes con una caída moderada del busto. Se realiza una incisión alrededor de la areola y otra en línea vertical hasta el surco submamario. Esta técnica permite una mejor remodelación del tejido y reposicionamiento de la glándula mamaria.
    Duración aproximada: 2 horas y 30 minutos.
    Ventaja: Mejora significativa de la forma sin cicatrices horizontales.

    3. Mastopexia en T invertida (o ancla)

    Recomendada en casos de ptosis severa, esta técnica implica tres incisiones: una circular alrededor de la areola, una vertical hasta el pliegue inframamario y una horizontal a lo largo del surco. Es la opción más completa para levantar senos muy caídos y con gran exceso de piel.
    Duración aproximada: 4 horas.
    Ventaja: Mayor capacidad de corrección y rediseño del contorno mamario.

    En todos los casos, el cirujano puede sugerir colocar implantes mamarios si se desea mejorar no solo la posición, sino también el volumen y la proyección del busto. Esta combinación de técnicas brinda resultados más armónicos, firmes y duraderos.

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    Cirujanos expertos en Mastopexia en Bogotá

    Dr Parra

    Dr. Jorge Emilio Parra Montoya
    Cirujano plástico experto y certificado en Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva.

    Dr. Johnatan L de Guevara
    Cirujano plástico certificado por la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva.

    ¿Quién es el candidato ideal para una mastopexia?

    La mastopexia, también conocida como cirugía de levantamiento de senos, está indicada para mujeres que presentan flacidez mamaria, caída del busto o una sensación de “vacío” en la cavidad pectoral. Este procedimiento busca reposicionar los senos en una posición más alta y juvenil, mejorando tanto su forma como firmeza.

    Las causas más comunes de la caída del pecho incluyen el paso del tiempo, la gravedad, embarazos, lactancia y pérdida significativa de peso. Estos factores provocan que la piel pierda elasticidad y que el tejido mamario se desplace hacia la parte inferior del busto, haciendo que los pezones apunten hacia abajo.

    Es importante destacar que esta condición puede presentarse tanto en mujeres con senos grandes como en aquellas con busto pequeño, ya que la flacidez mamaria no siempre está relacionada con el volumen.

    En casos donde, además de la caída, existe poco volumen mamario, el cirujano puede recomendar una mastopexia con implantes. Esta combinación permite levantar el pecho y, al mismo tiempo, mejorar la proyección y el tamaño con resultados naturales y duraderos.

    ¿Cómo es el proceso de una mastopexia?

    La cirugía de levantamiento de senos consiste en reposicionar la mama eliminando el exceso de piel y reubicando la areola y el pezón en una posición más alta y armónica. En casos leves, la intervención se realiza únicamente alrededor de la areola; cuando existe un mayor grado de caída o exceso de piel, puede ser necesario extender la incisión hasta el surco submamario.

    Las cicatrices, que suelen estar ubicadas alrededor de la areola (y en ocasiones de forma vertical u horizontal, según el tipo de mastopexia), tienden a volverse casi imperceptibles con el tiempo gracias a una buena cicatrización y cuidados postoperatorios.

    La intervención tiene una duración aproximada de una hora y media a dos horas, y una vez finalizada, el paciente permanecerá en observación hasta recuperarse completamente de la anestesia.

    Los resultados de la mastopexia son altamente satisfactorios, ya que no solo mejoran la estética del busto, sino también la autoestima y confianza de quienes se someten a este procedimiento.

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    Duración, tipo de anestesia y hospitalización en una mastopexia

    La cirugía de levantamiento de senos se realiza bajo anestesia general y tiene una duración estimada de entre 2 y 3 horas, dependiendo de las características específicas de cada paciente y del grado de caída de las mamas.

    El procedimiento se lleva a cabo en un quirófano certificado, bajo la supervisión de un equipo médico especializado en cirugía estética de mama. Tras la intervención, será el cirujano plástico quien determine si la paciente debe permanecer ingresada o si puede regresar a casa el mismo día, decisión que dependerá de la complejidad del caso y de la evolución postoperatoria inmediata.

    La mastopexia es una cirugía segura cuando se realiza en manos expertas, y el entorno hospitalario adecuado garantiza un proceso de recuperación más cómodo y controlado.

    Contáctanos para agendar tu consulta con nuestros cirujanos expertos en mastopexia o levantamiento de senos.

    Postoperatorio de una mastopexia: cuidados y recomendaciones

    Tras finalizar la cirugía de levantamiento de senos, la paciente deberá llevar un vendaje compresivo durante el tiempo que indique el cirujano plástico. Posteriormente, se utilizará un sujetador postquirúrgico especial, diseñado para brindar soporte, reducir la inflamación y favorecer una correcta cicatrización. Este sujetador suele proporcionarse directamente en la clínica.

    Durante los primeros días del postoperatorio de la mastopexia, es fundamental evitar movimientos bruscos, levantar peso o realizar cualquier tipo de ejercicio físico. El reposo relativo ayudará a acelerar la recuperación y minimizar posibles complicaciones.

    Las molestias tras la intervención suelen ser leves y se controlan fácilmente con la medicación prescrita por el médico. Es común experimentar una sensación de escozor o hipersensibilidad en los pezones, así como una leve pérdida temporal de sensibilidad en la zona tratada. Ambos síntomas son normales y tienden a desaparecer gradualmente conforme avanza el proceso de recuperación.

    Seguir al pie de la letra las recomendaciones médicas es clave para lograr una recuperación óptima y disfrutar de los resultados estéticos deseados.

    Preguntas frecuentes sobre la mastopexia en Bogotá

    ¿Cuándo se pueden ver los resultados definitivos de la mastopexia?

    Los primeros cambios se notan inmediatamente después de la cirugía, pero los resultados definitivos de la mastopexia suelen apreciarse entre 3 y 6 meses después, cuando la inflamación desaparece por completo y los tejidos se asientan.

    Sí, la mastopexia deja cicatrices, pero con el tiempo se atenúan y pueden volverse poco perceptibles. La ubicación y visibilidad dependen de la técnica utilizada y del proceso de cicatrización de cada paciente.

    El dolor es leve a moderado y puede controlarse con analgésicos recetados por el cirujano. Durante los primeros días, es normal sentir sensibilidad e inflamación en la zona tratada.

    Sí, la mastopexia puede realizarse sin implantes si la paciente tiene suficiente tejido mamario. En caso de pérdida de volumen, se recomienda combinar el levantamiento con implantes para mejorar la proyección y firmeza del busto.

    Los resultados pueden durar muchos años, pero factores como el envejecimiento, cambios de peso y embarazos pueden afectar la firmeza de los senos con el tiempo. Mantener un peso estable ayuda a prolongar los efectos de la cirugía.

    Dependiendo de la técnica utilizada, la mastopexia puede afectar la capacidad de lactancia si se alteran los conductos galactóforos. Sin embargo, muchas mujeres pueden amamantar sin problemas tras la cirugía.

    Sí, pero se recomienda esperar hasta después de tener hijos, ya que el embarazo y la lactancia pueden afectar los resultados de la cirugía y causar nuevos cambios en la forma y posición de los senos.

    Sí, la mastopexia puede corregir la asimetría mamaria ajustando la posición de la areola y eliminando el exceso de piel en cada seno para lograr mayor simetría y armonía en el busto.

    Se recomienda usar un brasier postoperatorio de soporte durante al menos 4 a 6 semanas para reducir la inflamación, mejorar la cicatrización y ayudar a que los senos se adapten a su nueva forma.

    Los resultados pueden durar muchos años, pero factores como el envejecimiento, cambios de peso y embarazos pueden afectar la firmeza de los senos con el tiempo. Mantener un peso estable ayuda a prolongar los efectos de la cirugía.

    Como cualquier cirugía, la mastopexia puede presentar riesgos como infección, hematomas, pérdida de sensibilidad en los pezones, cicatrización irregular o asimetría mamaria. Elegir un cirujano experimentado minimiza estos riesgos.

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